
¡Hola, aventureros del relax! Si estás buscando un lugar donde desconectar del estrés y cuidar de ti, Relais Termal - Balneario Termas Pallarés en Alhama de Aragón es tu destino ideal. Este encantador hotel de 4 estrellas cuenta con 54 habitaciones que invitan a un ambiente cálido y acogedor, perfecto para sentirte como en casa. Te aseguro que pasarás momentos inolvidables en este balneario histórico, rodeado de edificios del siglo XIX y espacios naturales que te dejarán sin aliento. ¡Imagina disfrutar de un día entero en su lago termal natural mientras te relajas a la sombra de los árboles!
Y eso no es todo, porque aquí no solo encuentras comodidad, sino también diversión y bienestar. Todos los huéspedes tienen acceso libre a zonas deportivas y jardines, así como al fantástico spa con baños termales. Si te apetece un respiro, no dudes en visitar el restaurante El Balneario, donde podrás probar delicias locales. Además, si no te alojas en el hotel, ¡puedes pasar el día en el lago también! Aprovecha las ofertas y ven a disfrutar de un espacio donde la naturaleza y la relajación se dan la mano. ¿Listo para mimarte un poco?

Relais Termal - Balneario Termas Pallarés

Mapa Ubicación Relais Termal - Balneario Termas Pallarés

Dónde se encuentra el Relais Termal - Balneario Termas Pallarés
¡Hola, equipo! Hoy os quiero contar sobre mi reciente escapada al Relais Termal - Balneario Termas Pallarés, un hotel de 4 estrellas en Alhama de Aragón, que prometía un montón de relax y desconexión. La dirección es Av. de la Constitución, 20, 50230 Alhama de Aragón, Zaragoza. La verdad es que el lugar tiene su encanto, pero no todo fue lo que esperábamos.
Al llegar, nos asignaron otro hotel que no era el que teníamos reservado, aunque nos dijeron que era de categoría superior. La habitación estaba bien de tamaño, pero la limpieza y el cuidado del lugar dejaban mucho que desear. Los suelos estaban rallados, había grifos con cal y marcos de las puertas levantados por la humedad... ¡una pena! Así que si vamos en grupo con amigos, ¡ojito con las expectativas!
Sobre el circuito termal, para qué os voy a contar. Estaba un poco en vergüenza, frío a más no poder y algunos chorros no funcionaban. Al final, tuvimos que salir 10 minutos antes porque no lo aguantábamos más. El ruido dentro del balneario era constante, gente gritando y muy poca tranquilidad. En cambio, el personal del restaurante era muy amable y la cena estuvo bien. Aunque, sinceramente, no sé si el hotel realmente cumple con el estándar de 4 estrellas superior que prometía.
A pesar de todo esto, el balneario tiene más de 200 años y el entorno es precioso con jardines y un lago natural. Se nota que tiene su historia y mucho encanto, aunque necesitaría un buen repaso. La comida es casera y está buena, y la verdad, aunque nos llevamos algún que otro chasco, la experiencia general fue razonable. Así que si tenéis ganas de un relax total, quizás valga la pena darle una oportunidad.
Y para rematar, el Relais Termal - Balneario Termas Pallarés se encuentra en Av. de la Constitución, 20, 50230 Alhama de Aragón, Zaragoza. Espero que si decidís pasar por allí, tengáis más suerte y disfrutéis al máximo de lo que el lugar puede ofrecer. ¡Nos vemos en la próxima escapada!

Cuántas habitaciones tiene el balneario
Y bueno, después de unos días en el Relais Termal - Balneario Termas Pallarés, no puedo evitar contarles más sobre mi experiencia. El balneario, aunque ha visto días mejores, tiene un encanto clásico que realmente vale la pena. Lo que más disfrutamos fue ese lago termal exterior que tiene. ¡Ah! Y esos peces que te limpian la piel, son una experiencia muy curiosa. El recorrido termal es agradable; el agua no está tan caliente como me hubiera gustado, pero el ambiente es tranquilo. Además, el personal es súper atento, lo que siempre se agradece.
Eso sí, el desayuno fue de lo mejor. Un buffet completo que nos dio energía para el día, aunque un poco concurrido. Nunca había esperado tanto para entrar a un buffet, pero bueno, una vez dentro, ¡a disfrutar! También tengo que decir que la comida del hotel tiene sus altibajos. Algunas cosas estaban bien, mientras que otras… digamos que no volvería a pedirlas. Pero, en general, es un lugar que se puede disfrutar en familia o con amigos.
Ahora, un aspecto que destacar es que, aunque se siente algo antiguo, el sitio te transporta a otra época. Tienen unas cuatro habitaciones en el balneario, así que el lugar puede llenarse rápido. Aprovechamos la cercanía a otras atracciones, como el monasterio de piedra, que es un must si estás por la zona. Volveremos, aunque espero que mejoren un poco las instalaciones, ¡ya que tiene mucho potencial!

Qué tipo de hotel es el Relais Termal
El Relais Termal - Balneario Termas Pallarés fue todo un descubrimiento. Ayer estuvimos haciendo el circuito termal y, sinceramente, salimos encantados. Las instalaciones son muy bonitas y el personal fue súper amable con nosotros, lo que siempre ayuda a que la experiencia sea mejor. ¡Ah! Fuimos con un bono regalo que nos regaló un amigo, lo cual fue un chollo, aunque la sauna no estaba funcionando, lo que fue una pequeña decepción. Y justo al terminar, sentimos que faltaba un secador de pelo, porque, seamos realistas, salir del agua y no poder arreglarse un poco no es lo mejor.
El lago, por otro lado, ¡vaya espectáculo! Aunque no nos metimos, porque estaba frío y lleno de peixos, tuvimos la oportunidad de dar un paseo alrededor que fue genial. El ambiente es muy relajante, perfecto para olvidarse del estrés, aunque llame la atención que la agua estaba fría, ¡más que en el balneario! Pero vale la pena dar una vuelta. Por cierto, la ubicación es fantástica, como para escaparse un rato y desconectar con la familia o amigos.
Ahora, aunque nuestra experiencia fue mayormente buena, hemos escuchado algunas críticas que cuentan otra historia. Al parecer, hay quienes llegaron y pensaron en marcharse porque encontraron todo en un estado bastante deteriorado. Suena bastante decepcionante, especialmente cuando esperas pasar un día relajante y terminas frustrado. El bufet también tuvo sus críticas; por lo que dicen, resultó bastante limitado en opciones y caro para lo que ofrecía. Sin embargo, también ha habido quien ha salido muy satisfecho de un masaje ayurvédico y lo considera un buen motivo para regresar, aunque después de las quejas podría ser mejor revisar antes de reservar.
Entonces, ¿qué tipo de hotel es el Relais Termal? Básicamente, es un hotel de 4 estrellas que combina el encanto de un balneario con la calidez de sus instalaciones. Es un lugar pensado para quienes buscan relajarse y disfrutar de un día de spa, aunque las opiniones parecen estar divididas en cuanto a la calidad del servicio y mantenimiento. Definitivamente, es un sitio que ofrece el potencial para ser una escapada ideal, siempre y cuando se den las condiciones adecuadas.

Qué ofrece el lago termal natural a sus visitantes
Y ya que estamos hablando del Relais Termal - Balneario Termas Pallarés, déjame contarte un poco más sobre nuestra experiencia. Aunque el personal era un poco seco al principio, hay que decir que fueron amables y correctos en su atención, solucionando rápidamente cualquier cosita que surgiera. A pesar de que teníamos una habitación en el hotel de cuatro estrellas, ¡nos dieron una mejor en el cuatro estrellas superior! Eso sí, el edificio está un poco más alejado del spa y la cafetería, así que prepárate para dar un paseo.
Aprovechamos nuestras vacaciones en grupo, y las habitaciones eran amplias y super limpias, aunque notamos un poco de salitre en los grifos. Es una pena, porque las instalaciones son muy grandes y se notaba que el mantenimiento fallaba un poco por la falta de personal. Y aunque la zona es tranquila y no nos sentimos inseguros, podrías notar que a veces se acumulan hojas y no dan abasto con la limpieza. Una pequeña mancha en un lugar que, en general, es muy bonito para desconectar.
Sobre la comida y bebida, el buffet estaba un poco escaso en comparación con el precio, pero al menos estaba aceptable. Sería genial que en el edificio de Cascada tuvieran más oferta de restauración y personal para atender mejor a los huéspedes. A veces se sentía un poco desangelado. Y ya que hablamos de las instalaciones, sería mil veces mejor si hubiera un mayor control en el circuito termal. Algunas personas no respetaban las áreas más demandadas, incluso abusaban de ellas sin pensar en los demás.
Y, claro, no puedo olvidarme del lago. Para nosotros, esa parte fue un poco… curiosa. Pagamos la entrada solo para disfrutar del lago, pero en 15 minutos nos salimos porque había peces de todos los tamaños que literalmente se dedicaban a darnos mordiscitos. Si no te importa esta experiencia inesperada, el agua estaba a una temperatura excelente y el entorno se notaba muy sereno. Entonces, ¿qué ofrece el lago termal natural a sus visitantes? Bueno, si puedes pasar por alto a los peces, tendrás acceso a un espacio relajante, rodeado de naturaleza, ideal para desestresarse y disfrutar de momentos únicos. ¡Así que si tienes un espíritu aventurero, adelante!

Existen zonas deportivas y jardines para los huéspedes
Y bueno, si no has probado el Relais Termal - Balneario Termas Pallarés, ¡tienes que hacerlo al menos una vez en la vida! La experiencia fue, en su mayoría, increíble. Las habitaciones son amplias y tienen un armario empotrado de esos que podrías vivir dentro. Además, ¡te dan albornoces! Perfecto para moverte con comodidad por el hotel. Y lo mejor, los desayunos buffet son un auténtico festín; no vas a querer salir de ahí. Ah, y si viajas con peques, hay tronas para bebés en el comedor, así que no os faltará de nada.
Hablemos del circuito termal, que fue sin duda uno de mis momentos favoritos. Imagínate esto: camas calientes para relajarte, habitaciones con vapor que te hacen sudar todo el estrés, y al final del circuito, unas bañeras tanto de agua caliente como fría. ¡Es el paraíso! También hay programación diaria con actividades divertidas como baile, bingo y alguna película por la tarde, así que siempre hay algo que hacer. Y no puedo olvidarme de EL LAGO. Es súper bonito, y aunque el agua estaba fresquita, no me resistí a meterme; ¡estaba lleno de gente disfrutando también! Totalmente recomendable.
Ahora, un par de cositas a tener en cuenta: el hotel, lamentablemente, necesita una reforma a fondo. Es un poco antiguo, y noté varios desperfectos—te enseño algunas fotos para que veas de qué hablo. La limpieza también podría mejorar; encontramos polvo debajo de la cama y hasta telarañas en el techo. Además, el acceso entre hoteles es un poco complicado, sobre todo si llevas un carrito de bebé, ya que no hay ascensor en la pasarela y tuvimos que subirlo nosotros mismos. Por otro lado, la temperatura del agua a veces es un poco difícil de regular, así que hay que tener un poco de paciencia.
En cuanto a actividades al aire libre, el hotel está ubicado cerca de bares y restaurantes en el pueblo, lo que hace que puedas salir a pasear y disfrutar del lugar. Aunque no vi zonas deportivas específicas ni grandes jardines para los huéspedes, el ambiente es tranquilo y familiar. Si te gusta la combinación de relax y diversión en familia, ¡este es tu lugar! A pesar de los detalles a mejorar, lo recomendaría sin dudarlo, siempre y cuando vayas con buen humor y dispuesta a disfrutar.
Qué servicios incluye el spa del balneario
Y así fue como llegamos al Relais Termal - Balneario Termas Pallarés, con toda la ilusión de relajarnos en aguas termales. Pero nada más llegar y después de hacer la fila durante media hora para hacer el check-in, nos llevamos una desilusión. Resulta que no teníamos vestuarios porque estaban ocupados por un set de rodaje. ¿Pagar 90€ por cambiarme en un baño compartido? Sinceramente, no me parece lógico. La primera impresión no fue nada buena, y ya empezamos a dudar si habíamos tomado la decisión correcta.
Al acercarnos al área de las termas, nos dimos cuenta de que solo había una parte disponible para usar, y ya les adelanto que el agua estaba helada, como si estuviéramos en una piscina en verano. Nada que ver con esas termas de las que me habían hablado, donde el agua sale tan caliente que hasta sale humo. Mi pareja hizo lo que pudo recorriendo el lado que se podía usar, pero para ser honesto, el ambiente dejaba mucho que desear. La superficie y el entorno no estaban tan cuidados como esperábamos, y sinceramente, ¿para eso pagamos?
Después de hacer un par de vueltas y darnos cuenta de que aquí no había opción de disfrutar de unas buenas termas, decidimos que lo mejor era hablar con recepción. Al menos, el personal se portó bien y me reembolsaron sin problemas. Un pequeño alivio en medio de toda la decepción. Y vengo de visitar estos balnearios desde hace años, solía ser un lugar increíble y la verdad es que volver y ver cómo ha deteriorado me dejó un mal sabor. También notar que el lago no estaba adaptado para personas con movilidad reducida fue otro gran golpe. Nos fuimos con la firme intención de contarle a todo el mundo lo mal que está la cosa.
Ahora, y para que os hagáis una idea, el spa del balneario incluye ciertas comodidades, pero realmente no son las que esperas cuando buscas relajarte. Tiene un par de jacuzzis y zonas de tratamientos, pero, francamente, creo que lo que ofrecen se queda corto si lo comparamos con otros lugares como Budapest o Ourense, donde las aguas están siempre calientes y listas para disfrutar. Así que si pensáis en una escapada relajante, tal vez deberiáis mirar otras opciones antes de decidiros por aquí.
Cómo es el ambiente de las habitaciones en el hotel
La verdad es que el Relais Termal - Balneario Termas Pallarés tiene mucho potencial por su ubicación en una zona preciosa y tranquila de Alhama de Aragón, pero hay algunas cosas que dejan bastante que desear. Te cuento que la primera impresión fue un tanto decepcionante, comenzando con el check-in que duró 50 minutos. O sea, ¿quién tiene tanto tiempo para esperar? Y aunque la habitación era amplia y luminosa, el aire acondicionado no funcionaba, lo cual resulta un poco incómodo, especialmente si planificas relajarte después de un día de spa. Ah, y las almohadas... digamos que eran más un despertar de cabeza pesada que otra cosa.
Pasando al buffet, esperaba algo más de un hotel de 4 estrellas. El desayuno fue un poco flojo y me sorprendió que no hubiera yogures ni dulces con chocolate. ¡Vamos! Es un desayuno, ¿no deberían incluir esas opciones? Además, ya para las 9:30 de la mañana, el zumo de piña estaba agotado; al menos había bebida de avena y soja, así que un punto a favor. La atención del personal, especialmente en el comedor, sí que fue excelente; eso se nota y se agradece.
En cuanto al lago termal, puedo decir que es lo más destacado, aunque el agua no está caliente y, sinceramente, dudo que llegue a esos 30 grados en los que tanto se presume. La experiencia de compartir el agua con los peces 'pellizcadores' es divertida, pero no es lo que uno busca en un spa. Hablando del spa 'aquathermal', no vale la pena. Es una serie de pasillos con chorros no tan funcionales, una sauna fuera de servicio y una pequeña bañera para lo que parece ser un uso masivo.
Ahora, sobre las habitaciones: son amplias y bonitísimas, con esas ventanas enormes que dejan pasara la luz. Aunque un espejo de cuerpo entero sería un buen toque, la decoración y los muebles están bastante bien conservados. Pero, ¿quién se puede relajar sin un aire acondicionado que funcione bien? En fin, el ambiente tiene su encanto, pero necesitaría algunas mejoras importantes para que la experiencia sea realmente memorable. Así que, en resumen, creo que no volvería si me preguntan, al menos por ahora.
Pueden los no alojados en el hotel acceder al lago termal
Y bueno, después de esos días en el Relais Termal - Balneario Termas Pallarés… la verdad es que las expectativas se fueron al traste. Éramos cinco amigos del 10 al 15 de noviembre y nos alojamos en el hotel de 4 estrellas. Imaginábamos un lujo y un servicio en condiciones, pero nos encontramos con un bufet libre donde la comida era exactamente la misma, independientemente de la categoría del hotel. ¡Menudo desengaño! La mayor parte de la comida parecía más de un 3 estrellas que de un 4.
Y hablando de decepciones, el circuito del spa fue otro gran fiasco. Funcionaba aproximadamente un 30% de lo que prometían. El agua apenas estaba tibia y, la verdad, ya nos estábamos preguntando si estaban bromeando con las instalaciones. El servicio en general fue más que desagradable, no parecía que quisieran atendernos adecuadamente, y eso, después de haber pagado una buena pasta, es un fastidio. Sin embargo, para ser justos, lo que más disfrutamos fue el lago termal: realmente es una pasada. Eso sí, huele un poco a pescado, lo que es raro, pero bueno, era agradable para relajarse un rato.
El fin de semana que pasamos por la zona nos motivó a probar el balneario por curiosidad, y ¡vaya sorpresa! Le echamos un vistazo al lago y, aunque inicialmente estaba emocionado, tocamos el agua y ya no era lo mismo. Los peces nadando ahí no ayudaban a darnos confianza, y cuando probamos otros servicios, la cosa no mejoró. El 'circuito aquatherma' nos dejó un sabor amargo; teníamos que cambiar a unos vestuarios pequeñitos que estaban en un estado bastante lamentable. No había casi nada de comodidad y, para colmo, los vestuarios eran mixtos... ¡ya empezábamos a dudar de nuestra elección!
Así que, si alguien está pensando en acercarse a las termas, permítanme ser claro: los no alojados en el hotel pueden acceder al lago termal, pero con un par de advertencias. Lo mirarás y te quedará claro que hay un nivel básico de servicio. Pero si lo que quieres es disfrutar de un balneario, mejor busca en otro lado. La atención y las instalaciones no valen la pena, y no creo que nosotros volvamos a darles otra oportunidad. ¡Ahí te lo dejo!
Cuál es el nombre del restaurante en el balneario
Así que, después de haber explorado un poco las Termas Pallarés, déjame decirte que el lago sigue siendo una gozada. Aunque los vestuarios y baños están en un estado un tanto lamentable, no puedes dejar pasar la oportunidad de pasar una tarde en sus aguas. Imagínate: te sumerges en ese relax absoluto, rodeado de una belleza paisajista sobresaliente que te hace sentir en otro mundo. Los edificios que lo rodean son súper encantadores, y eso te transporta directamente al lujo de principios del siglo XX. Sí, es cierto que la oferta hostelera ha bajado bastante en los últimos años, pero el entorno y esos edificios, ¡merecen una visita!
Por otro lado, si hay algo de lo que quejarse, es del hotel Termas. Recuerdo que hace años era un lugar estupendo, sus salones eran para quedarse a vivir, pero lamentablemente, el restaurante ha perdido bastante calidad. Y ya ni hablemos del Hotel Cascada, que antes era un 5 estrellas y ahora no queda nada de ese esplendor. Ojalá en el futuro puedan recuperar ese prestigio que estos lugares tan bonitos merecen.
Ahora, a mí como amante de las aguas termales siempre me ha sorprendido un poco lo templadas que son aquí. En comparación con otros destinos como Ourense o Budapest, donde el agua es realmente caliente, este lago con peces mordisqueando los pies no tiene el mismo encanto. Además, el acceso al centro termal es un poco caótico. Tienes que lidiar con un parking que parece regentado por gorrillas y el tema de los vestuarios deja mucho que desear. Con dos duchas y un par de vestuarios mixtos, ¡se siente un poco agobiante!
A pesar de todo, mi experiencia ha sido buena. El servicio es muy amable y los tratamientos hacen que valga la pena esos días de relax. He estado aquí ya varias veces, y aunque el circuito termal necesitaría una buena reforma, el lago es tan espectacular que, sin ninguna duda, volveré. Ah, y si te preguntas cuál es el nombre del restaurante en el balneario, lamento decir que no sirve el estelar menú que una vez tuvo. Tal vez el tiempo lo pueda cambiar, pero por ahora, es un poco decepcionante. ¡Así que ve con expectativas realistas y disfruta de esa escapada!
Qué tipo de gastronomía se puede disfrutar en el restaurante "El Balneario"
¡Vaya, qué lío eso de la atención telefónica, eh! Una verdadera basura. ¿Perder reservas y colgar el teléfono? Suena más a juego de niños traviesos que a un balneario de 4 estrellas. Te entiendo a la perfección: tener un bono regalo y que te de pereza canjearlo es frustrante. Con lo que costaron esos regalos, uno esperaría un poquito más de responsabilidad de parte del personal. Espero que, cuando finalmente te animes a ir, al menos la atención en persona sea mejor.
Y ya ni hablemos del vestuario. Fuimos un grupo de nueve amigos y la experiencia fue bastante penosa. ¿De verdad se espera que nos cambiemos en un baño? Es más, aquella zona de duchas era un desastre total. No había donde dejar las cosas, lo que hizo que estuviéramos dejando un rastro de agua por todas partes. Un poco de organización no le vendría mal a esos chicos. Con las expectativas altas que tenemos al ir a un spa, que al final termines cambiándote en un WC es simplemente indignante.
Por otro lado, es innegable que el lugar tiene su encanto, con más de 200 años de historia y esa naturaleza espectacular que lo rodea. Aunque, sinceramente, llega un punto en que la historia no lo es todo; las instalaciones necesitan una mano de obra. Es una pena que, a pesar de las hermosas vistas y del lago natural, la experiencia termal deje tanto que desear. Hubiera sido genial disfrutar del circuito completo sin esa sensación de prisas, pero parece que también tienen problemas de tiempo y gestión.
Y ya que hablamos de comida, el restaurante 'El Balneario' promete destacar por su gastronomía regional, ofreciendo platos que reflejan la cultura local. Así que a pesar de las desventajas, si logras aguantar hasta la hora de la cena, puedes esperar disfrutar de una buena comida. Espero que para entonces tu experiencia general haya mejorado un poco; porque, la verdad, después de tanto lío, ¡te lo mereces!
Qué tipo de estructuras históricas rodean al balneario
Vaya, parece que el balneario de Termas Pallarés ha dejado mucho que desear, ¿verdad? Es una lástima que lo que debería ser un rincón de relajación se haya convertido en un lugar que parece más una película de terror. Eso de comer una comida de mala calidad ya de por sí es un bajón, y si además las instalaciones parecen sacadas de El Resplandor, la experiencia se vuelve bastante desagradable. Cada uno merece disfrutar de unas instalaciones limpias y acogedoras, y no que te devuelvan el dinero de tu reserva y te cobren por entrar al comedor. ¡Vaya timo!
Y ya ni hablemos del check-in... 50 minutos en la recepción, y para llegar a una habitación que parece que se olvidaron de terminar. Eso de no tener dónde secar toallas y albornoces es un detalle que se podría evitar fácilmente. Al final, terminas con una pila de toallas húmedas que no hacen más que generar problemas, y la mampara de la ducha parece hacer todo menos contener el agua. Por no mencionar el ruido de las obras que te despierta a primera hora de la mañana, ¡qué placer!
Y la experiencia en el balneario, que se suponía que iba a ser relajante, tampoco ayuda. La sauna sin funcionar y las instalaciones llenas de escaleras que no son aptas para mayores o personas con movilidad reducida es bastante imperdonable. ¡Qué mal plan! La única parte que parece haber funcionado con un poco de gracia es la animación con Bea, que aunque hacía su mejor esfuerzo, estaba claramente limitada por la falta de recursos. En fin, que más que relajarte, solo genera estrés.
En cuanto a las estructuras históricas que rodean el balneario, es interesante saber que Alhama de Aragón tiene un pasado bastante rico, pero con todo lo que has mencionado, parece que lo olvidaron. Antiguas termales romanas y otros edificios alineados en la zona le dan un aire especial, pero tal vez sea necesario mejorar un poco las instalaciones antes de que puedas disfrutar plenamente del entorno. Por lo menos los momentos a orillas del lago, con esos peces que te mordisquean los pies, pueden ser un poco de diversión... siempre y cuando no te olvides de que el agua no es perfecta. ¡Esperemos que se mejoren pronto!
Cuáles son las principales actividades para el bienestar en el balneario
Y bueno, pues hoy es nuestro último día en Termas Pallarés. Lo bueno, sin duda, es que tienen un lago espectacular que se roba todo el protagonismo. Es increíble pasar el día allí, pero el resto de las instalaciones son, sinceramente, un desastre. Habíamos escuchado que este balneario era una maravilla, pero nos hemos encontrado con unas habitaciones normales para un hotel de tres estrellas y un servicio que deja bastante que desear.
La comida está bastante bien, aunque se repite un poco, y ni te cuento con los baños del lago: son un verdadero desastre, ¡totalmente descuidados y sucios! Te imaginas intentando relajarte en un lugar así, ¿verdad? Para colmo, hoy en la piscina de chorros, solo funcionaban cuatro chorros. ¿Y qué dijeron? Que era un protocolo para el Inserso, igual que los días anteriores había funcionado perfecto. Si no fuera por el lago, este lugar se iría al traste.
Así que si estás pensando en un viaje aquí, ten en cuenta que lo más destacado del balneario son las actividades relacionadas con el bienestar, que eso no se puede negar. Puedes disfrutar de unos tratamientos de spa y algunas actividades más relajantes, pero la experiencia puede variar bastante. En resumen, si estás buscando desconectar y disfrutar del agua, el lago te va a encantar, pero las instalaciones y la limpieza te dan ganas de salir corriendo. Así que ya sabes, ¡mejor ve con expectativas bajas y disfruta del paisaje!